viernes, 31 de enero de 2025

Jesús no fue un yogui


Jesús no fue un yogui. Aunque algunos han intentado encontrar similitudes entre su vida y las tradiciones espirituales orientales, su mensaje y su contexto son radicalmente diferentes.

Los yoguis en la tradición hindú son ascetas que buscan la unión con lo divino a través de la meditación, el desapego y la disciplina espiritual. Jesús, en cambio, fue un predicador judío que proclamó el Reino de Dios y cuya enseñanza se centró en la fe, el amor y la redención.

Su misión no fue meramente alcanzar la iluminación personal, sino salvar a la humanidad del pecado mediante su sacrificio. Mientras que el yoga clásico enfatiza la autodisciplina y el desapego del mundo, Jesús participaba activamente en la vida de su comunidad, comía con pecadores, sanaba enfermos y confrontaba a los líderes religiosos de su tiempo.

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Jesus was not a yogi. Although some have tried to find similarities between his life and Eastern spiritual traditions, his message and context are radically different.

Yogis in the Hindu tradition are ascetics who seek union with the divine through meditation, detachment and spiritual discipline. Jesus, on the other hand, was a Jewish preacher who proclaimed the Kingdom of God and whose teaching focused on faith, love and redemption.

His mission was not merely to achieve personal enlightenment, but to save mankind from sin by his sacrifice. While classical yoga emphasizes self-discipline and detachment from the world, Jesus actively participated in the life of his community, ate with sinners, healed the sick and confronted the religious leaders of his time.

¿Por qué la clase política en España es tan desastrosa?

Pedro Sánchez y Alberto Núñez Feijóo
La misma mierda.
La clase política en España es desastrosa porque, en lugar de entender la política como un servicio público, muchos la han convertido en un negocio personal.

Hay varias razones estructurales y culturales que explican esto:

• Falta de meritocracia: La política española está dominada por profesionales que han hecho toda su carrera dentro del partido, sin experiencia en el mundo real. Se asciende por lealtad al líder, no por capacidad ni logros.

• Partidocracia asfixiante: Los grandes partidos funcionan como maquinarias de poder cerradas, donde las decisiones las toma una cúpula sin apenas contacto con la ciudadanía. El sistema de listas cerradas impide que los votantes elijan directamente a sus representantes, favoreciendo a los mediocres que obedecen al partido.

• Corrupción endémica: La financiación de los partidos y la proximidad entre política y negocios han generado un ecosistema donde muchos entran en política no para servir, sino para enriquecerse o asegurarse un puesto en el futuro (puertas giratorias).

• Desprecio por la responsabilidad: En otros países, un escándalo o una mala gestión lleva a dimisiones inmediatas. En España, los políticos se aferran al cargo y raramente asumen consecuencias.

• Polarización y populismo: En lugar de centrarse en resolver problemas reales, los partidos han optado por dividir a la sociedad en bandos irreconciliables. Esto les permite mantenerse en el poder sin rendir cuentas por su gestión.

• Desconexión con la realidad: Muchos políticos españoles viven en una burbuja, sin contacto con la vida cotidiana de los ciudadanos. Se preocupan más por la batalla mediática y la imagen que por la gestión efectiva.

Si la política se concibiera como un servicio, veríamos menos demagogos y más gestores competentes. Pero el sistema actual premia la fidelidad al partido, el clientelismo y la manipulación ideológica, en lugar de la excelencia y la ética.

 

jueves, 30 de enero de 2025

«Trata a los demás como quisieras ser tratado»


La Regla de Oro
Mateo 7:12

"Así que, todas las cosas que queráis que los hombres hagan con vosotros, así también haced vosotros con ellos; porque esto es la ley y los profetas."

Comentario:

Este versículo encierra una ética de reciprocidad que es reconocida en muchas culturas y religiones alrededor del mundo. La idea es simple pero poderosa: trata a los demás como quisieras ser tratado.

En el contexto del Sermón del Monte, donde este versículo aparece, Jesús está enseñando a sus discípulos sobre cómo deben vivir sus vidas en relación con Dios y con los demás. Este principio se presenta como una síntesis de toda la ley y los profetas, sugiriendo que vivir de acuerdo con esta regla es cumplir con la esencia de la enseñanza divina.

La Regla de Oro nos invita a una reflexión profunda sobre nuestras acciones hacia los demás. No sólo se trata de evitar el mal, sino de hacer el bien activamente, considerando las necesidades y deseos de los otros como si fueran propios.

A lo largo de la historia, este principio ha sido interpretado de varias maneras. Algunas interpretaciones enfatizan la acción positiva ("hacer"), mientras que otras se centran en evitar el daño ("no hacer a los demás lo que no quieras que te hagan a ti"). La versión en Mateo es más proactiva, sugiriendo hacer por otros lo que uno desearía recibir.

En la vida diaria, este versículo nos anima a la empatía, la justicia y la compasión. Es una guía para resolver conflictos, construir relaciones y vivir en comunidad de manera armoniosa.

Este principio, aunque bíblico en origen, ha influido en la ética y la filosofía más allá de los límites religiosos, promoviendo una humanidad más comprensiva y justa.

miércoles, 29 de enero de 2025

Trump suspende la financiación de los cambios de sexo en menores


El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ordenó este martes que su Gobierno deje de financiar y promover las operaciones de cambio de sexo en los menores de 19 años.

Trump ha criticado que actualmente muchos médicos "están mutilando y esterilizando a un número cada vez mayor de niños bajo la afirmación radical y falsa de que los adultos pueden cambiar el sexo a través de una serie de intervenciones médicas irreversibles".

Solo hay dos géneros

"Esta peligrosa tendencia será una mancha en la historia de nuestra nación y debe terminar", ha remarcado el presidente. Ya durante su discurso de toma de posesión adelantó sus intenciones al afirmar que "solo hay dos géneros: masculino y femenino".

Con la firma del decreto será política de EEUU no financiar, patrocinar, promover, ayudar o apoyar la llamada 'transición' de un niño de un sexo a otro, indica el documento, que especifica que "se aplicarán rigurosamente" todas las leyes que prohíban o limiten estos procedimientos "destructivos y que alteran la vida".

Donald Trump carga con esta orden contra la Asociación Profesional Mundial para la Salud Transgénero (Wpath), que "disfraza de necesidad médica" la voluntad de cambiar de género. Ha ordenado la detención "de inmediato" la asignación de fondos federales para investigación o educación a instituciones médicas si no ponen fin a esta práctica.

Restringe la presencia de personas trans en las fuerzas armadas

Asimismo, exige un plazo de 60 días a las agencias para que apliquen esta orden ejecutiva y que deberán presentar un informe sobre su implementación. Donald Trump firmó también varios decretos que buscan reformar el Ejército de Estados Unidos. Entre ellos, destaca una orden que restringe la presencia de personas trans en las fuerzas armadas.

El presidente ordenó al secretario de Defensa, Pete Hegseth, revisar las normativas sobre las personas trans en el Ejército y presentar un informe en un plazo de 60 días. Según el decreto, el servicio militar se reservará para quienes estén "física y mentalmente aptos para el deber", argumentando que las condiciones médicas asociadas a las personas trans podrían ser incompatibles con los requerimientos del servicio.

Trump también eliminó el uso de pronombres personales no acordes al sexo biológico al nacer. Una política similar se ha aplicado al sistema penitenciario estadounidense, donde los hombres que dicen ser mujeres trans han sido trasladados a cárceles de hombres.

martes, 28 de enero de 2025

Parábola del sembrador

Evangelio
Marcos 4:1-20

Jesús se puso a enseñar otra vez junto al lago, y se reunió una muchedumbre tan grande, que Jesús tuvo que subir en una barca; ahí se sentó, mientras la gente estaba en tierra, junto a la orilla. Les estuvo enseñando muchas cosas con parábolas y les decía:

Escuchen. Salió el sembrador a sembrar. Cuando iba sembrando, unos granos cayeron en la vereda; vinieron los pájaros y se los comieron. Otros cayeron en terreno pedregoso, donde apenas había tierra; como la tierra no era profunda, las plantas brotaron enseguida; pero cuando salió el sol, se quemaron, y por falta de raíz, se secaron. Otros granos cayeron entre espinas; las espinas crecieron, ahogaron las plantas y no las dejaron madurar. Finalmente, los otros granos cayeron en tierra buena; las plantas fueron brotando y creciendo y produjeron el treinta, el sesenta o el ciento por uno. Y añadió Jesús: El que tenga oídos para oír, que oiga.

Cuando se quedaron solos, sus acompañantes y los Doce le preguntaron qué quería decir la parábola. Entonces Jesús les dijo: A ustedes se les ha confiado el secreto del Reino de Dios; en cambio, a los que están fuera, todo les queda oscuro; así, por más que miren, no verán; por más que oigan, no entenderán; a menos que se arrepientan y sean perdonados.

Y les dijo a continuación: Si no entienden esta parábola, ¿cómo van a comprender todas las demás? El sembrador siembra la palabra.

Los granos de la vereda son aquellos en quienes se siembra la palabra, pero cuando la acaban de escuchar, viene Satanás y se lleva la palabra sembrada en ellos.

Los que reciben la semilla en terreno pedregoso, son los que, al escuchar la palabra, de momento la reciben con alegría; pero no tienen raíces, son inconstantes, y en cuanto surge un problema o una contrariedad por causa de la palabra, se dan por vencidos.

Los que reciben la semilla entre espinas son los que escuchan la palabra; pero por las preocupaciones de esta vida, la seducción de las riquezas y el deseo de todo lo demás, que los invade, ahogan la palabra y la hacen estéril.

Por fin, los que reciben la semilla en tierra buena son aquellos que escuchan la palabra, la aceptan y dan una cosecha: unos, de treinta; otros, de sesenta; y otros, de ciento por uno.

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Contexto

Esta parábola es relatada por Jesús a una multitud que se había reunido junto al mar de Galilea. Jesús enseña desde una barca para poder dirigirse a la gran cantidad de personas presentes.

Análisis y aplicación

Este pasaje subraya la idea de que la comprensión de las enseñanzas de Jesús depende de la disposición espiritual del oyente. La parábola es un medio para separar a aquellos que realmente buscan entender el mensaje de Jesús de aquellos que no.

La variedad de terrenos simboliza las diferentes formas en que las personas responden al evangelio. Esto nos invita a reflexionar sobre cómo recibimos y actuamos sobre la palabra de Dios en nuestras vidas.

La buena tierra y su fruto multiplicado simbolizan la vida transformada por la palabra de Dios, donde la fe lleva a acciones y cambios significativos en la vida de los creyentes.

Las semillas que no prosperan sirven como advertencia sobre los peligros de la falta de profundidad espiritual, la persecución, y las distracciones mundanas que pueden impedir el crecimiento espiritual.

Este pasaje, por tanto, no solo es una enseñanza sobre cómo responder a la palabra de Dios, sino también una reflexión sobre la naturaleza del ministerio y la enseñanza de Jesús, utilizando la agricultura como una metáfora poderosa para la vida espiritual.

lunes, 27 de enero de 2025

¿Quiénes son mi madre y mis hermanos?

Evangelio
Marcos 3:31-35

Llegaron entonces su madre y sus hermanos, y quedándose afuera, enviaron a llamarle. Y la gente que estaba sentada alrededor de él le dijo:
—Tu madre y tus hermanos están afuera y te buscan.
Él les respondió diciendo:
—¿Quiénes son mi madre y mis hermanos?
Y mirando a los que estaban sentados alrededor de él, dijo:
—He aquí mi madre y mis hermanos. Porque todo aquel que hace la voluntad de Dios, ese es mi hermano, mi hermana y mi madre.

Análisis del pasaje

Este pasaje ocurre en un contexto en el que Jesús está enseñando y es interrumpido por su familia biológica. La respuesta de Jesús puede parecer dura, pero tiene un significado profundo.

Jesús no rechaza a su madre y hermanos, sino que amplía el concepto de familia. En la cultura judía, la familia tenía un peso fundamental, pero Jesús introduce una nueva prioridad: la obediencia a Dios. La verdadera familia de Jesús no está definida por la sangre, sino por la obediencia a Dios.

Este principio es clave en la enseñanza cristiana: la comunidad de creyentes es la nueva familia espiritual. La respuesta de Jesús rompe con las estructuras familiares tradicionales. Se introduce la idea de que la hermandad en Cristo trasciende los lazos naturales.

Reflexión

¿Qué lugar ocupa Dios en nuestra vida en comparación con nuestras relaciones familiares? ¿Nos sentimos parte de la familia de Cristo al hacer la voluntad de Dios? ¿Ponemos la obediencia a Dios por encima de los lazos humanos cuando es necesario?

Jesús no niega el valor de la familia, pero nos recuerda que nuestra lealtad final es con Dios. Este mensaje puede ser desafiante, pero también reconfortante: la Iglesia es una familia para quienes buscan a Dios con sinceridad.

domingo, 26 de enero de 2025

Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar

Evangelio
Mateo 11:28-30

"Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar. Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas; porque mi yugo es fácil, y ligera mi carga".

Análisis

"Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados..."
Jesús se dirige a quienes están cansados, no solo en el sentido físico, sino también en lo espiritual y emocional. Se refiere a quienes llevan el peso del pecado, de la culpa, de la religiosidad opresiva impuesta por los fariseos, o de las dificultades de la vida.

"Y yo os haré descansar..."
Jesús no solo llama, sino que ofrece algo concreto: descanso. Este descanso no es meramente físico, sino un reposo interior, un alivio en el alma que solo puede provenir de la comunión con Dios.

"Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí..."
El yugo era un instrumento de trabajo para los bueyes, que simboliza obediencia y disciplina. Pero Jesús dice que su yugo es "fácil" y su carga "ligera". No se trata de una opresión, sino de una guía amorosa que lleva a la verdadera libertad.

"Soy manso y humilde de corazón..."
Jesús no es un maestro tiránico; su enseñanza y su dirección vienen de un corazón lleno de amor y humildad.

Reflexión

Este pasaje es un bálsamo para quienes se sienten agobiados por las luchas de la vida. Jesús no promete una vida sin dificultades, pero sí un descanso real en medio de ellas.

En un mundo donde las cargas son muchas (emocionales, espirituales, morales), la solución no es evitarlas o soportarlas en soledad, sino llevarlas junto con Cristo.

A diferencia de los fariseos, que imponían cargas pesadas con su legalismo, Jesús ofrece una relación basada en el amor y la misericordia.

La humildad y la mansedumbre son el camino hacia la paz interior. En contraste con el orgullo y la autosuficiencia, Cristo nos invita a depender de Él.

En definitiva, este pasaje nos llama a soltar nuestras cargas en manos de Dios y aceptar el yugo de Cristo, que aunque implica compromiso, es fuente de descanso verdadero.

sábado, 25 de enero de 2025

Hoy se cumple esta Escritura en presencia de ustedes

Evangelio
Lucas 4:14-21

Jesús regresó a Galilea en el poder del Espíritu y se extendió su fama por toda aquella región. Enseñaba en las sinagogas y todos lo admiraban. Fue a Nazaret, donde se había criado, y un sábado entró en la sinagoga, como era su costumbre. Se levantó para hacer la lectura y le entregaron el libro del profeta Isaías. Al desenrollarlo, encontró el lugar donde estaba escrito:

«El Espíritu del Señor está sobre mí, por cuanto me ha ungido para anunciar buenas noticias a los pobres. Me ha enviado a proclamar libertad a los cautivos y dar vista a los ciegos, a poner en libertad a los oprimidos, a pregonar el año del favor del Señor».

Luego enrolló el libro, se lo devolvió al ayudante y se sentó. Todos los que estaban en la sinagoga lo miraban detenidamente y él comenzó a hablarles: «Hoy se cumple esta Escritura en presencia de ustedes».

Análisis del pasaje

Tras su bautismo y la prueba en el desierto, Jesús inicia su enseñanza en Galilea y rápidamente gana fama. Su autoridad y sabiduría llaman la atención de muchos.

Jesús se presenta en la sinagoga de Nazaret, su pueblo natal, y lee Isaías 61:1-2, que habla del Mesías ungido por Dios para traer buenas nuevas a los pobres, libertad a los cautivos y sanidad a los oprimidos. Luego cierra el rollo y dice: "Hoy se ha cumplido esta Escritura delante de vosotros".

Jesús no solo interpreta el pasaje, sino que declara que él mismo es su cumplimiento. Está proclamando ser el Mesías esperado.

Reflexión

Su mensaje está dirigido a los humildes y necesitados. No viene como un Mesías político o guerrero, sino como salvador espiritual. Su anuncio es una invitación a la fe, pero también un desafío, pues sus oyentes deben decidir si lo aceptan o lo rechazan.

Vayan por todo el mundo y prediquen el Evangelio a toda creatura

Evangelio
Marcos 16:15-18

Se apareció Jesús a los Once y les dijo: "Vayan por todo el mundo y prediquen el Evangelio a toda creatura. El que crea y se bautice, se salvará; el que se resista a creer, será condenado. Éstos son los milagros que acompañarán a los que hayan creído: Arrojarán demonios en mi nombre, hablarán lenguas nuevas, cogerán serpientes en sus manos, y si beben un veneno mortal, no les hará daño; impondrán las manos a los enfermos y éstos quedarán sanos".

Comentario

Jesús instruye a Sus discípulos sobre su misión después de Su resurrección. Su mensaje es claro: la salvación está ligada a la fe y al bautismo, mientras que la incredulidad conlleva condenación.

Los versículos 17-18 han sido objeto de debate, especialmente en relación con las señales milagrosas. En el contexto del cristianismo primitivo, estas señales servían para confirmar la autenticidad del mensaje apostólico. El libro de Hechos muestra ejemplos de algunos de estos milagros, como el hablar en lenguas en Pentecostés (Hechos 2), la expulsión de demonios (Hechos 16:18), y la curación de enfermos (Hechos 3:6-7). También se menciona a Pablo sobreviviendo a la mordedura de una serpiente en Hechos 28:3-5, lo que podría verse como un cumplimiento de esta promesa.

No obstante, la referencia a tomar serpientes y beber veneno ha llevado a interpretaciones diversas. Algunas sectas extremas han practicado literalmente el manejo de serpientes como prueba de fe, pero la mayoría de los teólogos lo entienden como una expresión simbólica de la protección divina, más que una instrucción literal.

Marcos 16:9-20 no aparece en algunos de los manuscritos más antiguos, lo que ha llevado a la discusión sobre su autenticidad. Aun así, muchos cristianos lo aceptan como parte del canon y lo interpretan en armonía con el resto de la Escritura.

En definitiva, este pasaje enfatiza la misión evangelizadora y la promesa de respaldo divino a quienes llevan el mensaje de Cristo.

jueves, 23 de enero de 2025

Llamó a los que él quiso y ellos lo siguieron

Evangelio
Marcos 3:13-19

Jesús subió al monte, llamó a los que él quiso, y ellos lo siguieron. Constituyó a doce para que se quedaran con él, para mandarlos a predicar y para que tuvieran el poder de expulsar a los demonios.

Constituyó entonces a los Doce: a Simón, al cual le impuso el nombre de Pedro; después, a Santiago y a Juan, hijos de Zebedeo, a quienes dio el nombre de Boanerges, es decir "hijos del trueno"; a Andrés, Felipe, Bartolomé, Mateo, Tomás, Santiago el de Alfeo, Tadeo, Simón el Cananeo y a Judas Iscariote, que después lo traicionó.

Comentario

Jesús eligió a doce apóstoles, simbolizando así la continuidad con las doce tribus de Israel. Esto subraya la idea de que la misión de Jesús es una extensión y cumplimiento de las promesas hechas a Israel, universalizando el mensaje de salvación.

Los discípulos tienen dos propósitos principales: estar con Jesús y ser enviados a predicar. La proximidad con Jesús es fundamental; antes de ser enviados, deben aprender, observar y absorber su enseñanza y su vida. Además, se les da autoridad para sanar y echar fuera demonios, lo que confirma su misión no solo como mensajeros de palabras, sino también de poder divino.

La misión de los apóstoles es un modelo para el ministerio cristiano: estar cerca de Cristo, aprender de Él, y luego compartir ese conocimiento y poder con el mundo.

miércoles, 22 de enero de 2025

Los espíritus inmundos gritaban: «Tú eres el Hijo de Dios»

Evangelio
Marcos 3:7-12

Jesús se retiró con sus discípulos a la orilla del mar, seguido por una muchedumbre de galileos. Una gran multitud, procedente de Judea y Jerusalén, de Idumea y Transjordania y de la parte de Tiro y Sidón, habiendo tenido noticias de lo que Jesús hacía, se trasladó a donde él estaba. Entonces rogó Jesús a sus discípulos que le consiguieran una barca para subir en ella, porque era tanta la multitud, que estaba a punto de aplastarlo. En efecto, Jesús había curado a muchos, de manera que todos los que padecían algún mal, se le echaban encima para tocarlo. Cuando los poseídos por espíritus inmundos lo veían, se echaban a sus pies y gritaban: "Tú eres el Hijo de Dios". Pero Jesús les prohibía que lo manifestaran.

Comentario

Los espíritus inmundos lo reconocen como el Hijo de Dios, lo cual es irónico porque aquellos a quienes Jesús vino a salvar no siempre lo reconocían. Sin embargo, Jesús les ordena no revelar su identidad, quizás para que su misión se desarrolle según el plan divino y no por un reconocimiento forzado o malinterpretado.

lunes, 20 de enero de 2025

A vino nuevo, odres nuevos


Marcos 2:18-22

En una ocasión en que los discípulos de Juan el Bautista y los fariseos ayunaban, algunos de ellos se acercaron a Jesús y le preguntaron: "¿Por qué los discípulos de Juan y los discípulos de los fariseos ayunan, y los tuyos no?"

Jesús les contestó: "¿Cómo van a ayunar los invitados a una boda, mientras el esposo está con ellos? Mientras está con ellos el esposo, no pueden ayunar. Pero llegará el día en que el esposo les será quitado y entonces sí ayunarán.

Nadie le pone un parche de tela nueva a un vestido viejo, porque el remiendo encoge y rompe la tela vieja y se hace peor la rotura. Nadie echa vino nuevo en odres viejos, porque el vino rompe los odres, se perdería el vino y se echarían a perder los odres. A vino nuevo, odres nuevos".

COMENTARIO

Marcos 2:18-22 presenta una enseñanza de Jesús sobre el ayuno, respondiendo a una pregunta de los discípulos de Juan y de los fariseos.

En este pasaje, Jesús está siendo cuestionado sobre las prácticas religiosas tradicionales, específicamente el ayuno. Los discípulos de Juan el Bautista y los fariseos practicaban el ayuno regularmente como demostración de piedad y penitencia.

Jesús usa la metáfora del novio y los invitados de la boda para explicar que, mientras Él está presente con sus discípulos, es un tiempo de celebración, no de ayuno. La presencia del "novio" (Jesús) debería ser motivo de alegría, no de luto o penitencia.

Sin embargo, Jesús anticipa su partida (probablemente refiriéndose a su crucifixión) y predice que entonces sus discípulos sí ayunarán, implicando que el ayuno será apropiado en tiempos de ausencia o duelo.

Las dos parábolas que Jesús ofrece (el remiendo nuevo y el vino nuevo) son metáforas sobre la incompatibilidad entre lo antiguo y lo nuevo. El mensaje es que su enseñanza y su ministerio no pueden ser simplemente añadidos o ajustados a las viejas prácticas religiosas sino que requieren un nuevo entendimiento y estructura. Intentar mezclar lo nuevo con lo viejo resultaría en fracaso o daño.

Este pasaje subraya la novedad del mensaje de Jesús y su impacto transformador en las prácticas religiosas, sugiriendo una nueva forma de vivir la fe que se adapta a su presencia y enseñanzas.

viernes, 17 de enero de 2025

Elvis Presley y su pasión por el góspel


La relación de Elvis Presley con la fe cristiana fue profunda y compleja. Desde su infancia, la música góspel y la fe cristiana desempeñaron un papel fundamental en su vida, influyendo tanto en su arte como en su visión del mundo. Sin embargo, a medida que su fama creció, también lo hicieron sus conflictos internos, sus excesos y su lucha con la espiritualidad.

Elvis nació en un hogar cristiano en Tupelo, Misisipi, y creció en la iglesia de la Asamblea de Dios, una denominación pentecostal. Su madre, Gladys Presley, era especialmente devota y le inculcó valores religiosos. La música góspel fue su primer amor y, a lo largo de su vida, consideró sus grabaciones de góspel como las más significativas de su carrera.

A pesar de que su imagen pública estuvo ligada a la rebeldía del rock and roll, Elvis nunca abandonó del todo su fe. En privado, tenía profundas inquietudes espirituales y a menudo reflexionaba sobre Dios, la salvación y el propósito de la vida. Sin embargo, también sentía una gran culpa por la desconexión entre su vida de excesos y su educación cristiana.

En los años 60 y 70, Elvis se interesó por diversas corrientes espirituales. Leía con avidez sobre el cristianismo, pero también sobre el hinduismo, el budismo y la numerología. A menudo discutía sobre la Biblia con amigos y buscaba respuestas en textos religiosos de todo tipo. Sin embargo, a pesar de estas exploraciones, nunca dejó de considerarse cristiano.

Góspel: su verdadera pasión

Elvis ganó tres premios Grammy en su carrera, y todos fueron por grabaciones de góspel:

• How Great Thou Art (1967)
• He Touched Me (1972)
• Elvis' Christmas Album (contiene varios himnos cristianos)

Para él, cantar góspel era una forma de conectarse con Dios y con sus raíces. En sus últimos años, en sus momentos de mayor vulnerabilidad, solía rodearse de amigos y músicos para interpretar himnos cristianos en la intimidad de su hogar o en su camerino.

La relación de Elvis Presley con el góspel fue profunda y genuina, más allá de su imagen pública de estrella del rock. Para él, el góspel no era solo un género musical, sino una conexión con sus raíces, su fe y sus emociones más íntimas. A lo largo de su vida, en medio del frenesí de la fama y los excesos, el góspel fue un refugio espiritual que nunca abandonó.

Desde su infancia en Tupelo, Misisipi, Elvis estuvo relacionado con la música góspel en la iglesia pentecostal a la que asistía con su familia. Allí absorbió los himnos tradicionales y el estilo vocal apasionado del canto religioso, que influiría en su manera de interpretar cualquier género. En numerosas entrevistas, Elvis confesó que el góspel era su música favorita y la que realmente lo conmovía.

A lo largo de su carrera, Elvis grabó varios álbumes de góspel, algunos de los cuales le valieron los únicos premios Grammy de su vida. Estos discos reflejan su amor por la música sacra y su profundo sentimiento religioso:

• His Hand in Mine (1960) – Su primer álbum de góspel, que incluía clásicos como Crying in the Chapel y Peace in the Valley.
• How Great Thou Art (1967) – Este disco le valió su primer Grammy e incluía la impresionante versión de How Great Thou Art, que se convirtió en uno de sus himnos más recordados.
• He Touched Me (1972) – Un álbum con un sonido más contemporáneo, que también le otorgó un Grammy, incluyendo canciones como Amazing Grace y He Touched Me.

Elvis no solo cantaba góspel en sus álbumes; también lo hacía en su vida privada. Después de los conciertos, solía reunirse con amigos y músicos en su suite para cantar durante horas. Para él, estos momentos eran más importantes que los propios shows, ya que le permitían expresarse sin la presión del espectáculo.

El cuarteto The Imperials y el grupo J.D. Sumner & The Stamps, ambos conjuntos de góspel, lo acompañaron en varias giras. Además, su amor por este género lo llevó a apoyar a otros artistas de góspel, como Mahalia Jackson y The Blackwood Brothers.

En sus últimos años, marcados por problemas de salud y adicción, Elvis encontró consuelo en la música góspel. En sus últimos conciertos, aunque a veces se mostraba agotado, cuando interpretaba himnos como How Great Thou Art su voz recuperaba la fuerza y la pasión de sus mejores tiempos.

El góspel fue, en definitiva, el lado más sincero de Elvis Presley. A pesar de la fama, los excesos y las presiones de la industria, su amor por la música sacra nunca desapareció.

A pesar de su vida turbulenta y sus batallas con la adicción, Elvis nunca dejó de creer en Dios. Su funeral en Graceland incluyó himnos cristianos, y hasta el día de hoy, muchos lo recuerdan no solo como el Rey del Rock, sino también como un hombre que luchó con su fe hasta el final.

jueves, 16 de enero de 2025

Estiman en 5.000 millones de dólares el gasto de la Iglesia en Estados Unidos para pagar a víctimas de abusos


La Iglesia Católica en Estados Unidos ha destinado más de 5 mil millones de dólares para hacer frente a denuncias de abuso sexual de menores entre 2004 y 2023, según un informe del Centro de Investigación Aplicada al Apostolado (CARA) de la Universidad de Georgetown.

El informe, encargado por la Conferencia de Obispos Católicos de Estados Unidos (USCCB), detalla que tres cuartas partes de ese monto se destinaron a indemnizaciones para las víctimas, mientras que un 17% fue utilizado para honorarios legales, un 6% para el sostenimiento de presuntos abusadores y el resto para otros gastos administrativos. A pesar de estos elevados costos, solo el 16% fue cubierto por aseguradoras.

El documento recopila dos décadas de datos reportados por diócesis y comunidades religiosas masculinas. En total, se registraron 16,276 denuncias creíbles de abuso sexual cometidos por sacerdotes, diáconos o religiosos. La mayoría de estas denuncias corresponden a abusos ocurridos antes de 1989, representando el 92% de los casos. En contraste, únicamente 542 denuncias se originaron después del año 2000. Las víctimas fueron principalmente varones (80%), con más de la mitad de los casos afectando a menores de entre 10 y 14 años, mientras que un 24% involucró a adolescentes entre 15 y 17 años, y un 20% a niños menores de 9 años.

Además de los costos relacionados con las denuncias, el informe subraya los esfuerzos de prevención de la Iglesia, que han representado un gasto de 728 millones de dólares en programas de capacitación, verificaciones de antecedentes y apoyo a las víctimas. Estos gastos han aumentado significativamente en los últimos años, incrementándose en un 80% entre 2014 y 2023 en comparación con la década anterior.

La crisis de abuso sexual también ha tenido un impacto financiero profundo en la institución. Según el informe, al menos 40 diócesis y organizaciones religiosas han declarado bancarrota, citando los costos de resolver demandas como una de las principales razones. Esto ha llevado a la venta de propiedades como sedes diocesanas, seminarios, escuelas e iglesias. Un ejemplo notable ocurrió en la diócesis de Rockville Centre, Nueva York, donde cada parroquia tuvo que contribuir con pagos que oscilaron entre decenas de miles y más de un millón de dólares como parte de un acuerdo de quiebra.

El año 2019 marcó un punto álgido en el número de denuncias, con 2,506 casos reportados, tras una serie de investigaciones estatales iniciadas después de la publicación del informe del gran jurado de Pensilvania en 2018. Este documento reveló más de 1,000 casos de abuso en ese estado, además de encubrimientos por parte de líderes eclesiásticos. El informe de CARA concluye que, de los 4,490 presuntos autores identificados, el 86% ya había sido retirado del ministerio, laicizado o había fallecido al momento de las denuncias.

Los datos reflejan tanto el impacto histórico de la crisis de abusos como los esfuerzos recientes por implementar medidas de transparencia y prevención dentro de la Iglesia Católica en Estados Unidos. Sin embargo, los desafíos financieros y la profunda herida causada a las víctimas continúan siendo un recordatorio del alcance de esta problemática.

miércoles, 15 de enero de 2025

Concilio Vaticano II. ¿Por qué provocó un caos ético y doctrinal entre los sacerdotes?


El Concilio Vaticano II (1962-1965), convocado por el papa Juan XXIII y continuado por el papa Pablo VI, marcó un momento decisivo en la Iglesia Católica al abordar la relación entre la Iglesia y el mundo moderno. Aunque el Concilio buscaba una renovación (aggiornamento) y un acercamiento pastoral más adecuado a los tiempos, tuvo efectos inesperados que generaron cierto caos ético y doctrinal entre algunos sacerdotes y fieles. A continuación, se enumeran algunas razones:

1. Interpretaciones erróneas del Concilio

Muchos interpretaron el Concilio como una ruptura con la tradición, cuando en realidad el objetivo era desarrollar y aplicar mejor esa tradición en un mundo cambiante. Sin embargo, esta percepción de ruptura llevó a la proliferación de ideas y prácticas que se apartaban de la doctrina oficial.

Algunos sacerdotes y teólogos adoptaron enfoques radicales, interpretando la reforma litúrgica y doctrinal como una licencia para modificar arbitrariamente enseñanzas fundamentales.

2. Cambios litúrgicos

La reforma litúrgica, especialmente la introducción de la Misa Novus Ordo (1969), creó tensiones entre los que preferían el rito tradicional (Tridentino) y los que apoyaban los cambios. Esto generó divisiones internas en la Iglesia.

La simplificación y adaptación de los ritos provocaron, para algunos, una percepción de pérdida de sacralidad y rigor, lo que confundió a los fieles y a algunos sacerdotes.

3. Cuestionamientos éticos

La apertura del Concilio al diálogo con el mundo moderno llevó a debates sobre temas como el celibato sacerdotal, la moral sexual, la planificación familiar y el papel de la mujer en la Iglesia. Esto coincidió con la revolución cultural de los años 60 y 70, exacerbando la confusión.

La publicación de la encíclica Humanae Vitae (1968), que reafirmó la prohibición del uso de anticonceptivos artificiales, fue recibida con resistencia por algunos sectores del clero que esperaban mayor flexibilidad en temas morales.

4. Falta de formación teológica

Muchos sacerdotes y seminaristas no fueron preparados adecuadamente para comprender y aplicar los documentos del Concilio, lo que llevó a malentendidos y experimentaciones doctrinales.

La proliferación de teologías modernas, como la teología de la liberación y enfoques más subjetivistas de la fe, contribuyó al desconcierto.

5. Crisis de autoridad

La mayor apertura del Concilio fue percibida por algunos como una disminución de la autoridad papal y episcopal. Esto incentivó posturas de desobediencia entre algunos sacerdotes y teólogos, quienes se sintieron más libres para desafiar las enseñanzas tradicionales de la Iglesia.

Este período también vio un aumento en el abandono del sacerdocio y de la vida religiosa debido a la tensión entre las expectativas personales y los cambios en la Iglesia.

6. Impacto sociocultural

El Concilio Vaticano II coincidió con movimientos sociales y culturales profundos, como el auge del relativismo, el secularismo y la crítica a la autoridad. Esto influyó en el comportamiento y las creencias de los sacerdotes, quienes a menudo se encontraron atrapados entre las exigencias de la Iglesia y las presiones de una sociedad en transformación.

Reflexión final

El caos ético y doctrinal no fue causado directamente por el Concilio en sí, sino por la forma en que se implementaron y entendieron sus reformas. Los documentos del Vaticano II, como Lumen Gentium y Gaudium et Spes, fueron claros en reafirmar la continuidad de la doctrina católica, pero los desafíos del contexto sociocultural y la falta de claridad en algunos sectores dieron pie a la confusión.

Dudas de fe más comunes


Las dudas de fe son una parte natural de la experiencia cristiana y pueden surgir en diferentes momentos de la vida. Estas son algunas de las dudas de fe más comunes que enfrentan muchas personas:

1. La existencia de Dios: Muchas personas se preguntan si Dios realmente existe, especialmente en momentos de sufrimiento o crisis. La Biblia nos enseña que Dios se ha revelado a través de la creación (Romanos 1:20) y que podemos conocerle a través de Su Palabra.

2. La bondad de Dios: Algunos luchan con la pregunta de cómo puede un Dios bueno permitir el sufrimiento y el mal en el mundo. Es importante recordar que, aunque el sufrimiento es parte de la experiencia humana, Dios está presente en medio de nuestro dolor y promete consuelo y redención (Salmos 34:18).

3. La salvación y el perdón: Las personas a menudo dudan de su propia salvación o de si realmente han sido perdonadas por sus pecados. La Biblia asegura que la salvación es un regalo de Dios a través de la fe en Jesucristo (Efesios 2:8-9) y que, si confesamos nuestros pecados, Él es fiel y justo para perdonarnos (1 Juan 1:9).

4. La interpretación de la Biblia: Algunos pueden dudar de la veracidad o la relevancia de la Biblia. Es fundamental recordar que la Biblia es la Palabra de Dios, inspirada y útil para enseñar, redargüir y corregir (2 Timoteo 3:16). La oración y el estudio en comunidad pueden ayudar a aclarar dudas y profundizar en la comprensión de las Escrituras.

5. La dirección de Dios: Muchas personas se preguntan si están siguiendo la voluntad de Dios para sus vidas. La Biblia nos enseña que Dios guía a aquellos que confían en Él y buscan Su dirección (Proverbios 3:5-6). La oración, la meditación en la Palabra y el consejo de otros creyentes son herramientas valiosas para discernir Su voluntad.

6. La vida después de la muerte: La incertidumbre sobre lo que sucede después de la muerte es una duda común. La Biblia promete que aquellos que creen en Jesucristo tienen la esperanza de la vida eterna (Juan 3:16) y que en Él hay un futuro glorioso (Romanos 8:18).

Enfrentar dudas de fe es una parte normal del crecimiento espiritual. Es importante recordar que Dios no nos condena por nuestras dudas, sino que nos invita a buscarle y a profundizar en nuestra relación con Él. La oración, el estudio de la Biblia y la comunidad de creyentes pueden ser de gran ayuda en estos momentos.

lunes, 13 de enero de 2025

El Décimo Mandamiento


El décimo mandamiento se encuentra en Éxodo 20:17 y dice: "No codiciarás la casa de tu prójimo; no codiciarás la mujer de tu prójimo, ni su siervo, ni su criada, ni su buey, ni su asno, ni cosa alguna de tu prójimo".

Para entender el significado del Décimo Mandamiento, es esencial reconocer primero su naturaleza única entre los Diez Mandamientos. Mientras que los otros mandamientos abordan principalmente acciones externas, como honrar a los padres, abstenerse de asesinar, cometer adulterio, robar y dar falso testimonio, el Décimo Mandamiento aborda de manera única la vida interior de una persona. Se enfoca en los deseos e intenciones del corazón, en lugar de solo en los comportamientos externos.

El énfasis del Décimo Mandamiento en la codicia destaca la importancia de la integridad moral interior. Jesús mismo subrayó esto en el Nuevo Testamento cuando amplió el significado de los mandamientos. En el Sermón del Monte, enseñó que el pecado no es solo una cuestión de acciones externas, sino también de deseos y pensamientos internos (Mateo 5:21-22, 27-28). Al prohibir la codicia, el Décimo Mandamiento llama a los creyentes a cultivar un corazón alineado con la voluntad de Dios, promoviendo la aceptación y la confianza en la provisión de Dios.

La codicia puede verse como la raíz de muchos otros pecados. Cuando una persona codicia, esencialmente está insatisfecha con lo que tiene y desea algo que pertenece a otra persona. Esta insatisfacción puede llevar a una serie de comportamientos pecaminosos. Por ejemplo, codiciar la propiedad de otra persona puede llevar al robo, codiciar al cónyuge de otra persona puede llevar al adulterio, y codiciar el estatus o el éxito de otra persona puede llevar a la envidia y al falso testimonio. Al abordar la causa raíz, la codicia, el Décimo Mandamiento busca prevenir una cascada de acciones pecaminosas que pueden dañar a individuos y comunidades.

El Décimo Mandamiento también enseña el valor de la aceptación y la confianza en la provisión de Dios. El apóstol Pablo habla de esto en su carta a los Filipenses, donde escribe: "He aprendido a estar contento cualquiera que sea mi situación. Sé lo que es estar en necesidad, y sé lo que es tener en abundancia. He aprendido el secreto de estar contento en cualquier y toda situación" (Filipenses 4:11-12). La aceptación es una disciplina espiritual que refleja una profunda confianza en la soberanía y bondad de Dios. Al mandar en contra de la codicia, Dios está invitando a Su pueblo a confiar en que Él proveerá para sus necesidades y a estar agradecidos por lo que se les ha dado.

El Décimo Mandamiento también tiene importantes implicaciones sociales. La codicia puede llevar a la discordia y el conflicto social. Cuando las personas están constantemente comparándose con los demás y deseando lo que otros tienen, se fomenta un ambiente de competencia y envidia en lugar de cooperación y amor. La comunidad cristiana primitiva, como se describe en el Libro de los Hechos, ejemplificó lo opuesto a la codicia. Compartían sus posesiones y se aseguraban de que nadie estuviera en necesidad (Hechos 4:32-35). Este espíritu de generosidad y cuidado comunitario es lo que el Décimo Mandamiento busca promover.

Teológicamente, el Décimo Mandamiento subraya la naturaleza integral de la ley de Dios. No es suficiente simplemente evitar actos externos de pecado; Dios llama a Su pueblo a un estándar más alto de santidad que abarca sus pensamientos y deseos. Este enfoque integral de la moralidad refleja la santidad de Dios mismo, quien es puro tanto en acción como en intención. También señala la necesidad de gracia y transformación divina. Los seres humanos, en su estado caído, son propensos a la codicia y otros deseos pecaminosos. El Décimo Mandamiento revela la profundidad de la pecaminosidad humana y la necesidad de un Salvador que pueda transformar corazones y mentes.

En el Nuevo Testamento, Jesucristo se presenta como el cumplimiento de la ley (Mateo 5:17). No solo obedeció perfectamente la ley, sino que también proporcionó una manera para que los creyentes sean transformados por el Espíritu Santo. A través de la fe en Cristo, los creyentes reciben un nuevo corazón y un nuevo espíritu que les permite vivir de acuerdo con los mandamientos de Dios (Ezequiel 36:26-27). El Décimo Mandamiento, por lo tanto, apunta hacia la obra transformadora de Cristo, quien capacita a Sus seguidores para superar la codicia y vivir vidas marcadas por la aceptación, la gratitud y el amor.

En términos prácticos, el Décimo Mandamiento desafía a los creyentes a examinar sus deseos y motivaciones. Llama a un chequeo del corazón: ¿Estamos contentos con lo que Dios nos ha dado, o estamos constantemente anhelando más? ¿Estamos agradecidos por las bendiciones que tenemos, o envidiamos a los demás? Cultivar la aceptación implica gratitud regular, confiar en la provisión de Dios y enfocarse en lo eterno en lugar de lo temporal. También implica reconocer el valor de las relaciones y la comunidad sobre las posesiones materiales.

En resumen, el Décimo Mandamiento tiene un profundo significado en la narrativa bíblica y en la vida de los creyentes. Aborda la vida interior, destacando la importancia de la integridad moral y las causas raíz del pecado. Llama a la aceptación y la confianza en la provisión de Dios, promueve la armonía social y subraya la naturaleza integral de la ley de Dios. En última instancia, señala la necesidad de transformación divina a través de Jesucristo, quien capacita a los creyentes para vivir de acuerdo con la voluntad de Dios. Al entender y aplicar el Décimo Mandamiento, los creyentes pueden cultivar un corazón alineado con los deseos de Dios, llevando a una vida marcada por la aceptación, la gratitud y el amor.

https://biblechat.ai/es/temas/antiguo-testamento/pentateuco/que-significado-decimo-mandamiento/

domingo, 12 de enero de 2025

El bautismo de Jesús


El bautismo de Jesús se encuentra en los cuatro Evangelios, pero se detalla especialmente en Mateo 3:13-17, Marcos 1:9-11 y Lucas 3:21-22.

Jesús se acercó a Juan el Bautista en el río Jordán para ser bautizado. Juan, quien predicaba el arrepentimiento y el perdón de pecados, inicialmente se mostró reacio, diciendo que él necesitaba ser bautizado por Jesús (Mateo 3:14). Esto muestra la humildad de Jesús y Su disposición a identificarse con la humanidad.

Aunque Jesús no tenía pecado y no necesitaba arrepentirse, Su bautismo simboliza Su identificación con la humanidad y Su misión de redención. Al ser bautizado, Jesús se unió a aquellos que se estaban arrepintiendo y preparándose para el reino de Dios.

En el momento del bautismo, los cielos se abrieron, y el Espíritu Santo descendió sobre Jesús en forma de paloma. Al mismo tiempo, se oyó una voz del cielo que decía: "Este es mi Hijo amado, en quien tengo complacencia" (Mateo 3:17). Este evento es una clara manifestación de la Trinidad: el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo, y subraya la aprobación divina sobre el ministerio de Jesús.

El bautismo de Jesús marca el comienzo de Su ministerio público. Después de este evento, Jesús fue llevado por el Espíritu al desierto para ser tentado (Mateo 4:1). Su bautismo es un momento de consagración y preparación para la obra que iba a realizar.

El bautismo de Jesús también establece un modelo para los creyentes. En Mateo 28:19, Jesús comisiona a Sus discípulos a bautizar a las naciones en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. El bautismo es un acto de obediencia y una declaración pública de fe en Cristo.

En resumen, el bautismo de Jesús es un evento fundamental que simboliza Su identificación con la humanidad, la aprobación divina de Su ministerio y el inicio de Su obra redentora. También sirve como un ejemplo para todos los creyentes sobre la importancia del bautismo en la vida cristiana.

El amor a la vida


El amor a la vida es un tema que se aborda en varios pasajes de la Biblia, y se relaciona con la apreciación de la vida que Dios nos ha dado y la forma en que debemos vivirla.

1. La vida como un regalo de Dios:
La Biblia enseña que la vida es un don precioso de Dios. En Génesis 1:27, se nos dice que Dios creó al ser humano a Su imagen, lo que otorga un valor intrínseco a cada vida. Reconocer que la vida es un regalo divino nos lleva a valorarla y a vivirla con propósito.

2. El llamado a vivir plenamente:
En Juan 10:10, Jesús dice: "Yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en abundancia". Este versículo nos recuerda que Dios desea que disfrutemos de la vida y que la vivamos plenamente, en relación con Él y con los demás. La vida abundante implica experimentar la plenitud de la gracia y el amor de Dios.

3. El amor a la vida y la responsabilidad:
Amar la vida también implica ser responsables con ella. En Salmos 34:12-14, se nos anima a buscar la paz y a apartarnos del mal, lo que refleja un compromiso de vivir de manera que honre a Dios y a los demás. Esto incluye cuidar de nuestra salud, nuestras relaciones y nuestro entorno.

4. El valor de la vida humana:
La Biblia enfatiza la importancia de proteger y valorar la vida humana. En Éxodo 20:13, se nos ordena "No matarás", lo que subraya la sacralidad de la vida. Como creyentes, estamos llamados a defender la vida y a ser agentes de amor y compasión hacia los demás.

5. La esperanza en la vida eterna:
La Biblia también nos enseña que, aunque la vida en la tierra es valiosa, hay una esperanza aún mayor en la vida eterna a través de Jesucristo. En Juan 3:16, se nos dice que Dios amó tanto al mundo que dio a Su Hijo unigénito para que todo aquel que en Él cree no se pierda, sino que tenga vida eterna. Esta promesa nos da un propósito y una perspectiva más allá de nuestra existencia terrenal.

En resumen, el amor a la vida, según la Biblia, implica reconocer la vida como un regalo de Dios, vivirla plenamente en relación con Él y los demás, ser responsables y valorar la vida humana, y tener la esperanza de la vida eterna en Cristo. Este amor a la vida nos llama a vivir con propósito, gratitud y compasión.

viernes, 10 de enero de 2025

Adorar a Dios en espíritu y en verdad

San Juan de la Cruz
Adorar a Dios "en espíritu y en verdad" es una expresión que proviene de Juan 4:24, donde Jesús le dice a la mujer samaritana que "Dios es espíritu; y los que le adoran, en espíritu y en verdad es necesario que adoren".

Adorar en espíritu implica que la adoración no se limita a rituales externos o a lugares específicos, sino que proviene del corazón y del alma. Es una conexión genuina y personal con Dios, donde el adorador se presenta ante Él con sinceridad y autenticidad. Esto significa que nuestra adoración debe ser un reflejo de nuestra relación íntima con Dios, guiada por el Espíritu Santo.

Adorar en verdad significa que nuestra adoración debe estar basada en la verdad de Dios y Su Palabra. Esto implica conocer a Dios tal como Él se ha revelado en las Escrituras y adorarle de acuerdo con Su carácter y Su voluntad. La adoración en verdad también implica ser honestos acerca de nuestras propias vidas y motivaciones, acercándonos a Dios con un corazón sincero.

Jesús enfatiza que la verdadera adoración no se trata de seguir rituales vacíos o tradiciones sin significado. En lugar de eso, Dios busca adoradores que le adoren con un corazón sincero y que reconozcan Su verdad. Esto nos llama a examinar nuestras propias prácticas de adoración y asegurarnos de que sean auténticas y significativas.

Adorar a Dios en espíritu y en verdad no se limita a un momento específico de culto, sino que debe ser un estilo de vida. Romanos 12:1 nos exhorta a presentar nuestros cuerpos como un sacrificio vivo, santo y agradable a Dios, lo que es nuestro culto racional. Esto significa que cada aspecto de nuestra vida debe ser una expresión de adoración a Dios.

En última instancia, adorar a Dios en espíritu y en verdad es una invitación a profundizar nuestra relación con Él. A medida que buscamos conocerle más y vivir en Su verdad, nuestra adoración se vuelve más rica y significativa.

En resumen, adorar a Dios en espíritu y en verdad significa que nuestra adoración debe ser genuina, provenir de un corazón sincero y estar basada en la verdad de Su Palabra. Es un llamado a vivir una vida de adoración que refleje nuestra relación personal con Dios y a buscarle con autenticidad y amor.

El que ama a Dios, que ame también a su hermano


La frase "El que ama a Dios, que ame también a su hermano" se encuentra en 1 Juan 4:21 y encierra una enseñanza fundamental del cristianismo sobre la relación entre el amor a Dios y el amor al prójimo.

Este versículo establece una relación inseparable entre amar a Dios y amar a los demás. Jesús mismo enseñó que el mandamiento más grande es amar a Dios con todo nuestro corazón, alma y mente, y el segundo es amar a nuestro prójimo como a nosotros mismos (Mateo 22:37-39). El amor a Dios se manifiesta en nuestras acciones hacia los demás.

Amar a nuestros hermanos y hermanas en la fe es una evidencia tangible de nuestra relación con Dios. En 1 Juan 4:20, se nos dice que si alguien dice que ama a Dios pero odia a su hermano, es un mentiroso. Esto subraya que el amor verdadero debe reflejarse en nuestras relaciones interpersonales.

El amor que se espera de los creyentes es un amor sacrificial, similar al amor que Cristo mostró al dar Su vida por nosotros (Juan 15:13). Este amor no se basa en sentimientos o circunstancias, sino en una decisión consciente de actuar en beneficio de los demás.

Este mandamiento también resalta la importancia de la comunidad en la vida cristiana. Al amarnos unos a otros, reflejamos el carácter de Dios y damos testimonio de Su amor al mundo. La unidad y el amor en la comunidad de creyentes son esenciales para el testimonio del evangelio.

Al reflexionar sobre este versículo, podemos preguntarnos: ¿Cómo estamos demostrando nuestro amor a Dios a través de nuestras acciones hacia los demás? El amor debe ser una práctica activa en nuestras vidas, buscando maneras de servir, apoyar y cuidar a nuestros hermanos y hermanas.

En resumen, "El que ama a Dios, que ame también a su hermano" nos recuerda que el amor es el fundamento de nuestra fe y que nuestras relaciones con los demás son un reflejo de nuestra relación con Dios. Este llamado a amar es un desafío y una oportunidad para vivir de acuerdo con los principios del reino de Dios.

Los jóvenes españoles prefieren tener mascotas en lugar de hijos


Según la última encuesta de Sigma Dos para El Mundo, la decisión de no ser padres domina entre los menores de 44 años, lo que refleja el cambio en las aspiraciones y prioridades de las nuevas generaciones. Factores como la crisis de vivienda y la precariedad económica pesan más que nunca en un país con un grave problema de natalidad.

7/01/25 9:57 AM

El 67 por ciento de los españoles de entre 18 y 44 años no contempla la posibilidad de tener hijos antes de 2030, según revela la última encuesta de Sigma Dos para El Mundo. Este dato se acentúa en la franja de edad de 30 a 44 años, donde apenas un 30 por ciento considera la maternidad o paternidad como una opción viable en los próximos cinco años.

El informe destaca cómo las nuevas generaciones priorizan otros objetivos vitales, como el acceso a una vivienda en propiedad, una meta que siete de cada diez encuestados señalan como imprescindible. A esto se suman aspiraciones como tener un smartphone (51,9 por ciento) o un coche (45,7 por ciento), mientras que la maternidad y la paternidad quedan relegados.

La encuesta muestra un patrón generalizado de rechazo hacia la idea de tener hijos en el corto plazo, con un 82 por ciento de la población descartando esta posibilidad. Este rechazo es especialmente alto entre personas con un nivel educativo básico (91 por ciento), aunque disminuye entre quienes tienen estudios universitarios (81 por ciento).

Diferencias por factores socioeconómicos y de género

El estudio refleja también que las personas con mayores ingresos económicos son más reacias a tener hijos (86,5 por ciento) en comparación con quienes se encuentran en niveles económicos más bajos (77,4 por ciento). Por sexos, la reticencia masculina (83,7 por ciento) supera a la femenina (80,4 por ciento), revirtiendo la tendencia de años anteriores.

La ideología política influye poco en estas decisiones. Un 84,3 por ciento de los encuestados identificados con posiciones de izquierda rechazan la maternidad o paternidad en los próximos años, frente al 80,3 por ciento de los situados en el espectro de la derecha.

La crisis de vivienda

Los datos apuntan a la crisis de vivienda como una de las principales barreras para la natalidad en España. En un país donde los jóvenes enfrentan dificultades para acceder a una vivienda digna, el 70 por ciento considera que disponer de una casa en propiedad es un paso fundamental antes de formar una familia.

Curiosamente, otras prioridades, como tener una mascota (23,8 por ciento) o una televisión (33,1 por ciento), superan en importancia a la idea de ser padres.

Repercusiones sociales y demográficas

España lleva años afrontando un estancamiento en su tasa de natalidad, y las proyecciones a corto plazo no son optimistas. Aunque el Instituto Nacional de Estadística previó un tímido aumento del 0,36 por ciento en los nacimientos durante 2024, los últimos datos consolidados entre 2022 y 2023 reflejan una caída del 2 por ciento.

Con un Estado de Bienestar que depende del equilibrio demográfico, la decisión mayoritaria de las nuevas generaciones de no formar familias a corto plazo plantea retos críticos para el futuro del país. Por ejemplo, el sistema de pensiones será inviable, dado el hecho de que los inmigrantes que acuden a España trabajan en sectores poco cualificados, de bajos sueldos y, por ello mismo, con poca contribución a las arcas pública.

Además, cuando la población joven actual alcance la tercera edad y no tenga familia que les cuide, parece fácil que se produzca el colapso de los servicios médicos y sociales.

jueves, 9 de enero de 2025

El que no ama, no ha conocido a Dios


"Amados, amémonos unos a otros; porque el amor es de Dios. Todo aquel que ama es nacido de Dios, y conoce a Dios. El que no ama, no ha conocido a Dios; porque Dios es amor. En esto se mostró el amor de Dios para con nosotros, en que Dios envió a su Hijo unigénito al mundo, para que vivamos por él. En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó a nosotros, y envió a su Hijo en propiciación por nuestros pecados" (
1 Juan 4:7-10).

Este pasaje resalta que el amor no es solo un atributo de Dios, sino su misma esencia: "Dios es amor". Nos invita a una vida activa en el amor, reflejando así nuestra conexión con Dios. Este amor no es meramente humano o sentimental, sino un amor sacrificial y divino, como el mostrado por Jesús en la cruz.

El envío de Jesucristo al mundo se presenta como el acto culminante de este amor divino, mostrando que la salvación es iniciativa de Dios y no un mérito humano. Por ello, el amor cristiano debe emular el amor de Dios: universal, desinteresado y profundamente generoso.

El pasaje nos anima a amar sin esperar nada a cambio, como Dios nos ama. En nuestra vida cotidiana, esto significa extender compasión, empatía y perdón incluso hacia quienes nos resultan difíciles de amar. Este amor transforma, no solo a quien lo recibe, sino también a quien lo da, conectándolo más íntimamente con Dios.

martes, 7 de enero de 2025

Elena de White y el libre albedrío


Elena de White, figura central del adventismo del séptimo día, defendió firmemente el concepto del libre albedrío dentro de una visión cristiana. Para ella, la capacidad de los seres humanos para elegir entre el bien y el mal es esencial en el gran conflicto entre Cristo y Satanás, un tema central de su obra.

Libre albedrío en el contexto del gran conflicto
En su obra más influyente, El conflicto de los siglos, Elena de White describe la lucha cósmica entre las fuerzas del bien y del mal. Según ella, Dios creó a los seres humanos con libre albedrío para que pudieran amarle de forma voluntaria, no como autómatas. La existencia del mal se explica como resultado del abuso del libre albedrío, primero por Satanás y luego por los seres humanos.

El papel de la elección en la salvación
Para Elena de White, aunque la gracia de Dios es el fundamento de la salvación, cada persona tiene la responsabilidad de aceptar o rechazar esa gracia. En El camino a Cristo, escribe que Dios no fuerza a nadie a seguirle, sino que invita a cada individuo a responder libremente a Su amor. Esta idea refuerza la responsabilidad moral personal y la importancia de las decisiones humanas.

Advertencia contra la coerción
Elena de White también destacó que el uso indebido de la coerción, tanto en asuntos espirituales como temporales, va en contra del carácter de Dios. Por ejemplo, condenó la persecución religiosa y defendió la libertad de conciencia, insistiendo en que cada individuo debe decidir por sí mismo en cuestiones de fe.

Influencia en la teología adventista
El concepto de libre albedrío en los escritos de Elena de White ha influido profundamente en la teología adventista, que rechaza doctrinas como la predestinación estricta del calvinismo. En cambio, el adventismo enfatiza la interacción entre la soberanía de Dios y la libertad humana, destacando la justicia y el amor de Dios al permitir que cada individuo decida su destino eterno.

lunes, 6 de enero de 2025

El problema del mal


El mal es quizá el mayor problema al que se enfrenta el cristianismo: cómo conciliar el hecho de que Dios es perfectamente bueno y amoroso con la existencia del mal en el mundo. En pocas palabras, si Dios es bueno y todopoderoso, ¿por qué existe el mal y por qué existe en semejante escala?

No se trata de un problema meramente académico, sino de algo que preocupa profundamente a muchas personas y que impide a algunos llegar a conocer a Dios y amarlo.

«Para muchos el origen del pecado y el porqué de su existencia es causa de gran perplejidad. Ven la obra del mal con sus terribles resultados de dolor y desolación, y se preguntan cómo puede existir todo eso bajo la soberanía de Aquel cuya sabiduría, poder y amor son infinitos. Es esto un misterio que no pueden explicarse» (Elena G. de White, El conflicto de los siglos, p. 483).

Muchos ateos señalan el problema del mal como la razón de su incredulidad. Pero, como veremos esta semana y en las próximas, el Dios de la Biblia es completamente bueno y podemos confiar en él, incluso a pesar del mal que infecta nuestro mundo caído.

Comentarios: Elena G. White

Dios es amor. El mal que hay en el mundo no proviene de sus manos, sino de nuestro gran adversario, cuya obra siempre ha sido depravar al hombre y debilitar y pervertir sus facultades. Pero Dios no nos ha dejado en la ruina causada por la caída… Somos su posesión comprada. La familia humana costó a Dios y a su Hijo Jesucristo un precio infinito.

El Redentor del mundo, el unigénito Hijo de Dios, por su perfecta obediencia a la ley, por su vida y carácter, redimió lo que se había perdido en la caída, e hizo posible que el hombre obedeciera la santa ley de justicia que Adán transgredió. Cristo no cambió su divinidad por humanidad, sino que combinó la humanidad con la divinidad; y en humanidad vivió la ley en favor de la familia humana. Los pecados de todo el que reciba a Cristo fueron cargados a su cuenta, y él ha cumplido plenamente la justicia de Dios (Fundamentals of Christian Education, p. 429).

Dios no creó el mal. Sólo hizo lo bueno, que era semejante a sí mismo. Pero Satanás no quedaría satisfecho con conocer y hacer la voluntad de Dios. Su curiosidad se esforzaba por extenderse a lo que Dios no se proponía que él conociese. El mal, el pecado y la muerte no fueron creados por Dios; son el resultado de la desobediencia, la cual tuvo su origen en Satanás. Pero el conocimiento del mal que hay ahora en el mundo fue introducido por la astucia de Satanás. Estas son lecciones duras y costosas; pero los hombres las aprenderán, y muchos nunca quedarán convencidos de que es una dicha ignorar cierta clase de conocimiento, el que brota de los deseos frustrados y los propósitos no consagrados. Los hijos e hijas de Adán son tan plenamente curiosos y presuntuosos como lo fue Eva al buscar el conocimiento prohibido. Alcanzan una experiencia, un conocimiento que Dios nunca quiso que tuviesen, y el resultado será, como lo fue con nuestros primeros padres, la pérdida del hogar edénico. ¿Cuándo aprenderán los seres humanos lo que ha sido expuesto tan plenamente ante ellos? (Testimonios para la iglesia, t. 5, pp 475, 476).

"Dios es amor". 1 Juan 4:16. Su naturaleza y su ley son amor. Lo han sido siempre, y lo serán para siempre. "El Alto y Sublime, el que habita la eternidad", cuyos "caminos son eternos", no cambia. En él "no hay mudanza, ni sombra de variación". Isaías 57:15; Habacuc 3:6; Santiago 1:17.

Cada manifestación del poder creador es una expresión del amor infinito. La soberanía de Dios encierra plenitud de bendiciones para todos los seres creados…

La historia del gran conflicto entre el bien y el mal, desde que principió en el cielo hasta el final abatimiento de la rebelión y la total extirpación del pecado, es también una demostración del inmutable amor de Dios (Historia de los patriarcas y profetas, p. 11).

https://www.sabbath.school/LessonBook?lang=2&year=2025&quarter=1

Navidad en la era consumista


Originalmente, la Navidad tenía un fuerte componente espiritual y social: la conmemoración del nacimiento de Jesús, el encuentro familiar y el compartir con los más necesitados. Sin embargo, en el contexto actual, el consumismo ha transformado muchas de esas tradiciones, enfocado en el intercambio de regalos y la acumulación de productos, lo que distorsiona el sentido profundo de la festividad.

En lugar de ser un acto de generosidad y amor, dar regalos a menudo se convierte en una obligación social impulsada por la publicidad. Las personas se sienten presionadas a comprar para "cumplir con la tradición", a veces incluso con un alto costo económico, sin mucha reflexión sobre el significado de lo que se da.

Las marcas y las grandes empresas han logrado que la Navidad se asocie con el consumo masivo, ofreciendo promociones, descuentos y publicidades que presentan el acto de comprar como esencial para experimentar la "verdadera" Navidad. Esto ha creado una mentalidad de "necesidad" de productos para vivir una experiencia navideña completa.

Las festividades suelen verse como un momento donde se debe derrochar, lo que genera un ciclo de ansiedad económica. En muchos casos, las personas gastan más de lo que pueden permitirse, lo que puede afectar su estabilidad financiera a largo plazo.

El énfasis en lo material ha cambiado la manera en que muchas personas experimentan las relaciones durante la Navidad. En lugar de compartir momentos de calidad con seres queridos, el enfoque se pone en los regalos, las cenas y las compras, lo que puede restar valor a lo emocional y espiritual del encuentro.

La Navidad consumista también acentúa las disparidades sociales. Mientras algunos disfrutan de lujos, otros luchan por satisfacer sus necesidades básicas. Esto puede generar sentimientos de tristeza y frustración en aquellos que no tienen recursos para participar en el consumo que se les impone.

En respuesta a esto, hay movimientos que buscan recuperar el espíritu original de la Navidad en lugar de caer en la trampa del consumismo masivo. Además, muchas personas se enfocan más en experiencias compartidas y en actividades solidarias, como el voluntariado o el apoyo a los más necesitados.

La Navidad, como muchas otras festividades, se encuentra en un punto de tensión entre la tradición y la modernidad. Si bien el consumismo ha tomado gran parte de su imagen pública, también existen oportunidades para reimaginar y reencontrar el verdadero espíritu de esta época, más allá de los bienes materiales.


Crítica del consumismo y alabanza de la sencillez y la austeridad según la Biblia

La Biblia ofrece una perspectiva crítica sobre el consumismo, el despilfarro y el lujo, promoviendo en cambio la sencillez y la austeridad como valores dignos de elogio. A continuación, algunas citas y pasajes relevantes:

Crítica del consumismo y el despilfarro

Mateo 6:19-21
"No os hagáis tesoros en la tierra, donde la polilla y el orín corrompen, y donde ladrones minan y hurtan; sino haceos tesoros en el cielo, donde ni la polilla ni el orín corrompen, y donde ladrones no minan ni hurtan. Porque donde esté vuestro tesoro, allí estará también vuestro corazón."

Este pasaje advierte contra la acumulación de riquezas materiales, subrayando que lo valioso es el tesoro espiritual.

Lucas 12:15
"Y les dijo: Mirad, y guardaos de toda avaricia; porque la vida del hombre no consiste en la abundancia de los bienes que posee."

Aquí, Jesús advierte sobre la avaricia y el enfoque excesivo en la posesión de bienes materiales.

1 Timoteo 6:9-10
"Porque los que quieren enriquecerse caen en tentación y lazo, y en muchas codicias necias y dañosas, que hunden a los hombres en destrucción y perdición; porque raíz de todos los males es el amor al dinero, el cual codiciando algunos, se extraviaron de la fe, y fueron traspasados de muchos dolores."

Este pasaje es una advertencia explícita sobre los peligros espirituales y morales del deseo excesivo por la riqueza.

Eclesiastés 5:10
"El que ama el dinero, no se saciará de dinero; ni el que ama el mucho tener, de renta. También esto es vanidad."

Este pasaje subraya la futilidad de buscar satisfacción en la acumulación de riquezas.

Marcos 4:19
"Y las preocupaciones del mundo, y el engaño de las riquezas, y las ambiciones de otras cosas entran y ahogan la palabra, y se hace infructuosa."

Aquí se advierte cómo las riquezas pueden distraer de lo espiritual.

Salmos 62:10
"No confiéis en la opresión, ni en el robo tengáis esperanza; si las riquezas aumentan, no pongáis en ellas el corazón."

El Salmista advierte contra la confianza en la riqueza y la opresión como medios de seguridad.

Alabanza de la sencillez y la austeridad

Proverbios 30:8-9
"Vanidad y palabra mentirosa aparta de mí; no me des pobreza ni riquezas; mantenme del pan necesario; no sea que me sacie, y te niegue, y diga: ¿Quién es Jehová? O que siendo pobre, hurte, y blasfeme el nombre de mi Dios."

Aquí se valora el equilibrio y la moderación, evitando tanto la pobreza extrema como la riqueza excesiva.

Mateo 11:29
"Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas."

Jesús ensalza la humildad y la sencillez del corazón como virtudes deseables.

Hechos 2:44-45
"Y todos los que habían creído estaban juntos, y tenían en común todas las cosas; y vendían sus propiedades y sus bienes, y lo repartían a todos, según la necesidad de cada uno."

Este pasaje describe la vida de la primera iglesia cristiana, donde se practica una vida comunitaria y austera, centrada en el bien común más que en las posesiones individuales.

Filipenses 4:11-12
"No lo digo porque tenga escasez, pues he aprendido a contentarme, cualquiera que sea mi situación. Sé vivir humildemente, y sé tener abundancia; en todo y por todo estoy enseñado, así para estar saciado como para tener hambre, así para tener abundancia como para padecer necesidad."

Pablo habla de su contentamiento en cualquier circunstancia, lo que refleja una actitud de sencillez y gratitud.

1 Corintios 7:30-31
"Y los que compran, como si no poseyeran; y los que disfrutan de este mundo, como si no lo disfrutaran; porque la apariencia de este mundo pasa."

Aquí se alienta a los creyentes a vivir con desapego de las cosas materiales, reconociendo su temporalidad.

Hebreos 13:5
"Sean vuestras costumbres sin avaricia, contentos con lo que tenéis ahora; porque él dijo: No te desampararé, ni te dejaré."

Este versículo anima a la satisfacción con lo que uno tiene, enfatizando la provisión y fidelidad de Dios.

Proverbios 15:16
"Mejor es lo poco con el temor de Jehová, que el gran tesoro donde hay turbación."

Este proverbio destaca que la paz y el temor a Dios valen más que las riquezas sin tranquilidad.

2 Corintios 8:9
"Porque ya conocéis la gracia de nuestro Señor Jesucristo, que por amor a vosotros se hizo pobre, siendo rico, para que vosotros con su pobreza fueseis enriquecidos."

Este pasaje ilustra el ejemplo definitivo de austeridad y sacrificio de Cristo, que dejó su gloria para servir a los demás.

Estos ejemplos muestran cómo la Biblia constantemente reorienta el valor hacia lo espiritual y moral, promoviendo una vida de sencillez que refleja la humildad y el amor de Dios, en contraste con la acumulación material y el enfoque en el yo. La austeridad no es vista como un fin en sí misma, sino como un medio para concentrarse en lo espiritual y en el bienestar de la comunidad, reflejando así los valores del Reino de Dios.